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'Lectura
Extinción
Aprendizaje
Explicar el papel de la extinción en la reconfiguración de la diversidad biológica y el estudio de los fósiles como prueba de la existencia de otros organismos.
Introducción
Hace poco más de sesenta años que los biólogos comenzaron a emplear el concepto de "extinción" para referirse a la desaparición de especies vegetales y animales que la actividad humana estaba provocando en todo el planeta.
En términos biológicos se considera a la extinción como un fenómeno natural, resultado de la evolución, en la que una especie se origina a partir de otra, lo que ocurre en el lapso de varios miles o varios cientos de miles de años.
La extinción de una especie no es un evento aislado, sino que genera una serie de eventos que provocan desequilibrios que afectan a las demás especies, como la pérdida de eslabones en la cadena alimenticia, o la estabilidad c1imática, la cual depende en gran medida de la presencia de bosques y selvas que mantengan los patrones de lluvias, regulen las temperaturas, absorban el exceso de bióxido de carbono de la atmósfera y ayuden a la producción de oxígeno.
No se conoce el número de especies que hay en el planeta, pero se estima que existen entre 10 Y 50 millones, de las cuales se encuentran identificadas poco mas de 1,400,000, de ellas, entre insectos, arácnidos y crustáceos hay unas 850,000 especies, 300,000 más son especies vegetales y el resto de los demás grupos taxonómicos. La mayor concentración de especies está en los trópicos, en las selvas y arrecifes de coral, por lo que la mayor biodiversidad está en esta pequeña franja del planeta.
Contenido
Las cinco grandes extinciones
Todas las teorías que pretenden explicar la extinción de las diferentes especies de organismos pueden agruparse en dos corrientes principales:
1) Las graduales o de fondo, que afectan a pocas especies y ocurren durante periodos prolongados de tiempo.
2) Las catastróficas o masivas que se refieren a eventos rápidos ocurridos casi instantáneamente en el registro geológico y que afectan a gran número de especies.
Las extinciones masivas son aquellas producidas por fenómenos naturales c1imáticos y de otro tipo que causan al menos la desaparición del 65% de las especies existentes en ese momento. Durante los últimos 600 millones de años se han producido 20 extinciones masivas, cinco de las cuales estuvieron a punto de hacer desaparecer la vida en la Tierra.
La primera extinción:
Se produjo hace uno 438 millones de años, al final del período Ordovícico, debido a una larga glaciación que afectó principalmente la vida marina, sobre todo a los braquiópodos y trilobites que vieron diezmada su población. La vida terrestre prácticamente no existía en ese tiempo.
La segunda extinción:
Ocurrió hace 367 millones de años a fines del período Devónico, debida probablemente a cambios c1imáticos globales, hizo desaparecer a un gran número de especies de peces y al 70% de los invertebrados marinos.
La tercera extinción:
Fue la más grande de todas, en el límite entre los períodos Pérmico y Triásico, hará unos 245 millones de años, formando el límite entre las eras Paleozoica y Mesozoica. En esta gran extinción masiva desaparecieron el 90% de las especies marinas y la mayoría de los vertebrados terrestres como reptiles y anfibios. Los conocidos trilobites desaparecieron para siempre. No están claros los motivos de esta tercera extinción, pudiendo tratarse de una mezcla de cambio c1imático, movimiento de placas tectónicas e incluso el impacto de un meteorito contra la Tierra.
La cuarta extinción:
A fines del Triásico hace 210 millones de años, terminó con el 60% de las especies, dando paso a la evolución de los dinosaurios y a pequeños mamíferos. Aún hoy es difícil para los expertos definir las causas que motivaron esta extinción.
La quinta extinción:
Quizás la más famosa de todas, ocurrió al final del Cretácico hace 65 millones de años. Durante ella perecieron un gran número de especies además de los dinosaurios y los ammonites, como consecuencia de ello los mamíferos se adueñaron de los espacios terrestres y los peces de los mares. La causa de esta extinción se atribuye al choque de un meteorito de gran tamaño contra la Tierra, en lo que hoy es la península de Yucatán, seguido de una cadena de eventos volcánicos a lo largo de todo el planeta.
La sexta extinción.
Los seres humanos ponemos en peligro la existencia de las demás especies de varias formas, como la caza, la introducción de especies foráneas, la deforestación de bosques y selvas, la fragmentación de los hábitats, la destrucción de los ecosistemas y la contaminación de la tierra y los mares.
Según Niles Eldredge esta sexta extinción la podemos dividir en dos fases:
• La fase uno comenzó cuando los primeros humanos modernos comenzaron a dispersarse a diferentes parte del mundo hace uno 100,000 años.
• La fase dos comenzó hará unos 10,000 años cuando los humanos empezaron la agricultura.
La primera fase comenzó poco tiempo después de que el Homo sapiens evolucionó en África y empezó a emigrar y a dispersarse por todo el mundo. L1egaron al Medio Este hace 90,000 años, a Europa hace 40,000 años (donde desaparecieron a los Neandertales) y por la misma época llegaron a Australia, invaden Norteamérica hace 12,500 años y aparecen en el Caribe apenas harán 8,000 años.
En todas partes, poco tiempo después de la llegada de los humanos muchas especies nativas (especialmente las más grandes) desaparecieron rápidamente, llegando a la extinción de gran cantidad de ellas. Al invadir desde África los demás continentes, los humanos se comportaron como chivos en una cristalería.
La fase dos de la sexta extinción comenzó alrededor de 10,000 años atrás con la invención de la agricultura, la cual parece haber sido inventada varias veces en lugares diferentes, esparciéndose por todo el mundo. La agricultura representa el cambio ecológico más profundo de los 4,500 millones de años de la historia de la Tierra, ya que para poder desarrollarla es necesario declarar la guerra a los ecosistemas, haciendo cambios a la tierra para que produzca uno o dos cultivos alimenticios. Todas las otras especies de plantas nativas pasan a ser hierbas indeseables y todas menos unas pocas especies domesticadas de animales se consideran como pestes.
Según el registro fósil se calcula que en períodos normales, es decir, sin que intervenga ningún cataclismo terrestre o extraterrestre se pierden dos especies cada cuatro años, pero en la actualidad, segun E. O. Wilson se extinguen más de 25,000 especies al año, lo que significa la pérdida de tres especies por hora.
La sexta extinción parece ser el primer evento global de extinción documentado que tiene una causa biológica en vez de una causa física, esta sexta gran crisis de extinción de la diversidad biológica será dada por la intervención exclusiva del hombre.
Como dice Richard Leakey en su libro "La sexta extinción": "EI Homo sapiens está maduro para ser el destructor más colosal de la historia".
Los fósiles
Desde la antigüedad los fósiles llamaron la atención de las personas, eran usados como amuletos o para realizar rituales, fueron considerados como ensayos de Dios para la creación de la vida y como prueba del diluvio universal.
Etimológicamente, la palabra fósil, proviene del adjetivo latino fossilis, que se aplica a cualquier cosa desenterrada, sin embargo podemos definirla como "toda evidencia de vida que hubo en el pasado". Los fósiles son cualquier resto, huella o molde de seres vivos de tiempos geológicos pasados.
Par lo tanto, un fósil puede ser tanto el molde o la impresión dejada por un animal o una planta, la huella de la pisada de un dinosaurio o sus huesos, los artefactos o pinturas dejadas por nuestros antepasados homínidos e inclusive organismos conservados enteros, en hielo y en ámbar. Generalmente se consideran fósiles cuando su antigüedad es mayor de 10,000 años.
Los fósiles son estudiados por la rama de la Biología denominada Paleontologia, que es la ciencia que estudia la vida y su evolución a través de los fósiles.
Cuando un ser vivo muere, tiende a desintegrarse, tanto en sus partes blandas como en sus partes duras. Por lo que para que un organismo vivo se convierta en fósil al morir se deben dar al menos cuatro circunstancias favorables:
1) Recubrimiento rápido de los restos por parte de los sedimentos. 2) Condiciones físicas adecuadas del medio. 3) Condiciones químicas convenientes, poco ácidas. 4) Características intrínsecas favorables del propio organismo.
Los fósiles se encuentran en las rocas de origen sedimentario, es imposible hallarlos en rocas de origen magmático, y muy raro en rocas metamórficas, porque la presión y la temperatura los hacen desaparecer. Los procesos de fosilización son principalmente cuatro: mineralización, sustitución, carbonización, moldes y vaciados.
Lo anterior nos hace pensar en la dificultad de un organismo para que su fósil llegue a nuestras manos, por lo que sólo los organismos de especies muy abundantes han podido llegar a nosotros; además, por cada especie de la que tenemos constancia, debieron existir cientos de miles que desaparecieron sin dejar huella.
Los fósiles tienen importancia desde cualquier ángulo que se les estudie, ayudan a calcular la edad de las rocas y de los estratos geológicos, por ejemplo para identificar estratos del Paleozoico se utilizan los trilobites, para el Mesozoico los ammonites, en el Cenozoico los lamelibranquios y en el Cretácico los foraminíferos. También ayudan a conocer los procesos de cambios c1imáticos globales y gracias a ellos se puede conocer el medio físico y biológico en que se desarrollaron tales o cuales especies, desentrañando tipos de vida primitivos y obteniendo información acerca de la edad de las especies y de las relaciones entre ellas. Los fósiles guía o fósiles índices como los foraminíferos son primordiales en la búsqueda de yacimientos petroleros.
</center>Figura 7. Restos fósiles: trilobites y ammonites, característicos del Paleozoico y Mesozoico.</center> La Tierra tiene una antigüedad de 4,500 millones de años y los primeros fósiles datan de hace 3,600 millones de años, correspondientes a la actividad de bacterias y cianobacterias (los llamados estromatolitos). Los primeros fósiles de animales son de hace 700 millones de años, los primeros vertebrados de hace 400 millones de años y los mamíferos de apenas 200 millones de años. Sólo en algunos casos se ha podido reconstruir el registro fósil completo de algún animal, el caso típico es el del caballo.
Bibliografía
Curtis, H. y S. Barnes. 2003. Biología. Editorial Médica Panamericana. España.
Eldredge, N. 1998. Life in the Balance. Humanity and the biodiversity crisis. Princeton University Press. Princeton.
Fósil, Revista de Paleontología (ISSN 0717-9235)
Wilson, E. O. 1993. The diversity of life. Harvard University Press. Cambridge.