El hecho de la evolución un hecho natural.

El hecho de la evolución: un hecho natural.

Uno de los argumentos más usados en contra de la teoría de la evolución, es que la evolución en ciencia es conocida como una ‘teoría’, y diversos autores que no aceptan la transformación de las especies como una realidad fáctica aseguran que “ni los propios evolucionistas están convencidos de la evolución”. Se parte del hecho de que en el lenguaje común la palabra teoría se emplea en sentido especulativo, por ejemplo en referencia a algo: “en teoría funciona, pero en los hechos es otra cosa”, da la impresión de que la teoría es una idea o una hipótesis aún no probada. Pero esto es una interpretación incorrecta de los significados de hipótesis, teoría y la diferencia entre teoría y el hecho de la evolución. Existe una diferencia importante en ciencia, entre lo que es una hipótesis y una teoría, y entre una teoría y un hecho. Una hipótesis es una explicación de una observación o de un fenómeno en particular, expresada de tal manera, que puede ser sometida a verificación por medio de la experimentación. Los resultados de la experimentación le dirán al investigador si la hipótesis planteada puede ser aceptada como fue planteada, si debe ser rechazada porque no la apoyan los resultados, o si puede ser modificada para ser consistente con nuevos hallazgos. En conclusión, la hipótesis es una suposición que puede ser aceptada o rechazada ante las evidencias, sobre todo de tipo experimental.

Cuando una hipótesis ha sido repetidamente verificada por observaciones y experimentación, se convierte en una teoría. Las teorías científicas tienen que ser respaldadas por repetidas experimentaciones y observaciones coherentes entre si, y no son meras especulaciones o adivinanzas como suele coloquialmente usarse el término. Una teoría no es el producto de una única hipótesis, sino de varias hipótesis y un largo procesos de experimentación y reflexión. Una teoría usualmente puede incorporar varias hipótesis verificadas. Por ejemplo, la teoría atómica combina un cierto número de hipótesis producto de investigaciones tanto en química como en física, y como cualquier otra teoría científica, la teoría atómica ha sido verificada a través del tiempo. Para que una teoría continúe siendo aceptada como correcta, debe consistentemente predecir el resultado de nuevos experimentos o de fenómenos relacionados con ella, y al mismo tiempo, resolver problemas prácticos, como calcular velocidades, o saber cuando un tipo sanguíneo es compatible con otro y cuando no.

Un hecho científico por su parte, se establece a partir de la solidez de una teoría y se acepta que los ‘hechos’ científicos son los eventos que ocurren en el mundo, independientemente de nuestra conciencia, los entendamos o no, o nos gusten o nos disgusten. A través de la practica científica se ha establecido como un hecho, que el sol es la parte central de nuestro sistema solar, que la tierra tiene una forma esférica, que las plantas liberan oxigeno mediante la fotosíntesis y que las especies se transforman

Si decimos que la evolución es “sólo una teoría”, tendríamos que decir también que lo mismo ocurre con la teoría de la relatividad de Einstein, o la teoría heliocéntrica de Copérnico, pero ¿existe acaso alguna duda sobre si el Sol es el centro de nuestro sistema solar?, y sobre otros hechos y teorías como la de la deriva continental y la tectónica de placas. Sin la teoría atómica, la tabla periódica de los elementos no serviría de nada, ya que nadie ha visto un átomo y por lo tanto la química sería únicamente una mera especulación. También la electricidad es una construcción teórica, ya que nadie ha podido ver un electrón, y sin embargo, la teoría nos ayuda a comprender fenómenos y a resolver problemas prácticos, como poder leer durante la noche. ¿Qué sería de nuestro mundo y forma de vida sin la confianza en las teorías científicas?. Así pues, el decir que la evolución es “sólo una teoría” implica el desconocimiento de la terminología científica, de la forma en que la ciencia trabaja y de las diferencias entre hipótesis, teorías y hechos. Por lo que podemos decir, que quienes afirman que la teoría de la evolución es una mera especulación, o lo hacen por falta de cultura científica o lo hacen por que defienden una cosmovisión del mundo diferente, pero que paradójicamente se benefician en su vida cotidiana de los resultados del conocimiento científico.

Una teoría para los científicos no es una especulación poco confiable, sino una afirmación que explica y se ajusta a observaciones y experimentos consistentes unos con otros. Desde luego que una teoría puede se rechazada posteriormente si nuevas observaciones y experimentos demuestran lo contrario, y esa es una de las virtudes de la ciencia, aceptar o rechazar hipótesis y teorías de acuerdo a las evidencias existentes hasta el momento.

Hablando de la evolución podemos decir que no sólo es una teoría sino que es un hecho con numerosas evidencias. La diferencias entre un hecho y una teoría se puede expresar de la siguiente manera: los hechos son los sucesos naturales del mundo; las teorías son las explicaciones a los hechos con base en evidencias, datos e información que nos ayudan a explicar e interpretar al mundo natural. El hecho es la transformación de las especies, la teoría, es la explicación de cómo y por qué se da la evolución. .

Pueden existir diferentes explicaciones para un hecho, desde especulaciones mitológicas, a explicaciones científicas. También, entre los científicos puede haber diferencias en la explicación a un determinado hecho, y éstas pueden ser grandes o pequeñas, pero esto no modifica el hecho.

Si decimos por ejemplo, que al Sol lo vemos salir por el este y ocultarse por el oeste, las explicaciones pueden ser: que Faetón conduce el carro solar (mitología griega) tirado por cuatro caballos, desde un palacio de oriente hasta un palacio en occidente a través del cielo cada día, o que el Sol se mueve alrededor de la Tierra, o que la Tierra gira alrededor del Sol. Sea cual sea la explicación, el sol aparece en el oriente y se oculta en occidente y esto es un hecho.

Los científicos distinguen entre hechos y teorías. Del hecho (la evolución) los científicos tienen certeza, ya que existe un gran número de evidencias (paleontológicas, geológicas, biogeográficas, anatómicas, genéticas etc.), pero con respecto a las explicaciones sobre el hecho de la evolución existen diferencias, ya que hasta ahora no se han podido comprender en su totalidad los procesos evolutivos, pero se está trabajando en ello. En este caso, la evolución es un hecho y la teoría de la selección natural es una de las explicaciones al hecho. En cuanto a las controversias entre la comunidad científica, algunos autores sostienen que existe un gran número de mutaciones que pueden no estar sujetas a la selección natural (teoría neutralista) y que pueden ser transmitidas de generación en generación y que los cambios no son tan graduales (teoría del equilibrio puntuado) como se sostiene en el darwinismo clásico. Sin embargo no se duda del hecho: es decir, dentro de la comunidad de biólogos no se duda de la transformación de las especies, se debate sobre como ocurre o como ha ocurrido, pero eso no pone en duda el hecho de la evolución, los debates sirven para enriquecen la explicación y el conocimiento evolutivo.

Las dudas y debates entre científicos no es señal de una mala práctica racional, sólo es signo de una buena salud intelectual, que fortalece y da credibilidad a la ciencia.


M. en C. Héctor Rivera Valladares